miércoles, 3 de noviembre de 2010

Quisiera vivir en mi lugar especial, el lugar que en mis sueños aparece y que en mi corazón persiste. Quisiera combatir la soledad, olvidar al olvido y matar a la muerte, sacrificar al sacrificio y sonreírle a la felicidad.

Quisiera hacer tantas cosas imposibles en su imposibilidad humana, que hicieran a mis labios elevarse y a mi corazón enloquecer.

Quisiera atormentar a mis sueños más tormentosos, para que escapasen a la superficie, al lugar más oscuro del universo, y así fuesen desapareciendo, desapareciendo, desapareciendo.

Quisiera tantas cosas imposibles de lograr, pero posibles en mi lugar especial. Solo me queda sonar, soñar que todo es posible, la calma, la seguridad y la felicidad en su inmensidad total, para poder seguir así, viviendo, viviendo, existiendo, sobreviviendo, hasta el día que pueda soñar para siempre, con mi lugar especial.

sábado, 17 de julio de 2010

Anestesia para mi corazón, esa es la clave de mi felicidad.
¡No! No es cierto, la clave de la felicidad esta en uno mismo. Pero, ¿Cómo encontrarla?
Gran pregunta mi querido susodicho. A pesar de la larga vida corta sin fin del ser racional pero irracional que domina el mundo, pero a la vez no sabe nada de él, no sabe como encontrarla. Es una verdad misteriosa en todos sus sentidos, aún no se ha encontrado prueba alguna de que la felicidad existe realmente, ya que aún no he logrado conocer a una sola persona en este planeta, opaco asoleado, que haya sido feliz en su inmensidad total. Pero debo admitir, mi querido desconocido contertulio, que creo haber estado cerca de la felicidad alguna vez...
¡FALACIAS! ¿Qué es lo que acabo de decir? ¿Qué alguna vez estuve cerca de la felicidad? Vaya, he quedado perplejo ante mi propia verdadera mentira... creo que paso de esta filosofía filosófica, dado que no encuentro respuesta alguna para darte, solo me queda seguir reflexionando sobre esta enredada pregunta que nunca acabará. Ya que, si alguna vez alguien encuentra una respuesta verdaderamente acertada, no creeré su palabra, debido a que será imposible que alguien alguna vez sea capaz de alcanzarla... pero aún así, sigue trabajando y no te rindas jamás, que la vida es largamente corta para mi mundanal gusto, es algo relativamente complejo, algo que no tiene fin.
Lamentablemente, la felicidad es y seguirá siendo, una meta raramente, que digo, jamás alcanzada completamente, ya que creo que para ser feliz hay que ser alguien superior a esta raza inferior pero que es superior a las demás, supuestamente.
Bueno, creo que hasta aquí dejaré mi reflexión, ahora solo me centraré en tratar de encontrar esa respuesta en carne propia, para poder así seguir viviendo, firme como un roble, pero frágil como un pétalo de flor. Nada más queda cumplir el ciclo asignado de mi vida, ya que respecto a eso nada puedo hacer, pero seguiré buscando respuesta a esta pregunta realmente innecesaria.

domingo, 20 de junio de 2010

Recuerdos


Hoy he pensado muchas cosas, en pintar un cielo estrellado o quizás un jardín; dibujar un hombre pereciendo bajo la calidez de los brazos del sol, o posiblemente una mariposa escapando de la prisión de su capullo, volando y volando hasta llegar al edén. Pero sin embargo, luego de mis reflexiones que me llevan hacia la luna, decidí aterrizar en el triste mundo de la realidad. Me deprimí pensando en todas aquellas cosas que me hicieron sufrir, cada detalle, cada palabra, cada dolor, fue recordado.
Pero luego de haberme sumergido en mi mar de lágrimas, decidí salir a la superficie, escapar a la orilla del mar, a tierra firme, refugiándome bajo los árboles y escuchando el ruido tranquilizador del viento y del mar. Y mientras me encontraba en la inconsciencia de mi inconsciente sueño una voz dulce y amarga me susurro al oído, "Solo tu eres dueña de tupasado, de tus recuerdo, solo tu... sabes lo que quieres recordar".
Me desperté exaltada, agitada y fatigada, pero aquella voz cruel, dulce y sabia hizo que hasta el más fuerte de mis recuerdo sean superados. De pronto una nube de sucesos interminables y desconocidos aparecieron en mi mente. Todos aquellos recuerdos que poseía guardados dentro de un baúl, en la esquina de mi corazón salieron para ser vistos, recuerdos que no recordaba, cosas hermosas que superan con creses cualquiera de mis sufrimientos. Recuerdos que me hacen llorar, pero con otros sentimientos, sentimientos de alegría.
Solo sé que la vida es un maestro, aquel que enseña lo bueno y lo malo de la existencia, y que cuando ese maestro sabio quiera tomar una medida severa conmigo, tu estarás allí para pegar con tu pegamento de amor y y compasión todas aquellas veces que me hizo y me hará llorar.

sábado, 24 de abril de 2010


En momentos como estos es cuando siento que mi vida deja de tener sentido. Todo lo que me rodea se vuelve inerte, mi corazón se desvanece y la gente se torna transparente.
Hasta lo que he amado más en mi vida se vuelve molesto y tengo ganas de evitarlo, para estar sola, tranquila y así poder escuchar a mi ahogado corazón.
Solo queda dejar que el tiempo pase, para poder vivir así, como alguna vez soñé, porque hasta eso se ha escapado de mi vida. Esa frase tan simple y que cualquier persona le gusta mantener en su vida, mis sueños. Sueños... algo que antes parecía ser tan hermoso, algo que antes me alejaba de la realidad y me permitía ser feliz, me permitía tener esperanza, me permitía ser libre... hoy, todo eso ha cambiado, ahora que comprendí que los sueños solo son sueños, unos absurdos engaños, para poder creer que todo cambiará, aún así, cuando la vida te mira con tristeza, tratando de decirte que todo seguirá igual. Solo son una escapatoria sin salida de la realidad.